Procedimiento
A través de distintas técnicas quirúrgicas, se pueden modificar los defectos refractivos del ojo como la miopía, el astigmatismo, la hipermetropía y la presbicia; para de esa forma abandonar la dependencia de lentes aéreos o de contacto.
Una de las alternativas quirúrgicas más utilizadas es la cirugía con Excimer Láser, a través de la técnica Lasik o Lasek. Otra opción es el implante de una lente intraocular, sea esta fáquica o de pseudofaquia. A través de un análisis exhaustivo y personalizado de cada ojo se plantea la técnica quirúrgica apropiada para cada caso.
No todas las personas son candidatas a cirugía refractiva. Por ello, buscamos siempre la mejor combinación de eficacia, seguridad y satisfacción de las necesidades visuales según cada paciente en particular, realizando tratamientos personalizados.
Miopía
Es un defecto de refracción o error en el enfoque visual. Las imágenes se enfocan por delante de la retina y no sobre ella, lo que provoca visión borrosa lejana. Suele aparecer en la infancia y evoluciona hasta alededor de los 20 años, cuando tiende a estabilizarse.
Esta patología afecta a una cuarta parte de la población, aunque esta cifra va en aumento. Se puede corregir -a partir de aproximadamente los 24 años- mediante láser o con lentes intraoculares.
Astigmatismo
Es un defecto refractivo que provoca que las imágenes se enfoquen sobre la retina de forma distorsionada. Afecta a la visión de cerca y de lejos y provoca visión borrosa o distorsionada. Puede aparecer solo o asociado a miopía o hipermetropía. Suele ser estable durante toda la vida.
Cerca de un 30% de la población es astigmática y más del 80% de miopes e hipermétropes tienen astigmatismo. Se puede corregir -a partir de aproximadamente los 24 años- mediante láser o con lentes intraoculares.
Hipermetropía
Es un defecto de refracción o error en el enfoque visual. Las imágenes se enfocan por detrás de la retina. Provoca una visión borrosa, especialmente de cerca.
Alrededor de un 10% de la población es hipermétrope. La hipermetropía puede corregirse fácilmente con gafas (con lentes convergentes) o con lentes de contacto. Aunque el grado de hipermetropía sea pequeño, la corrección es aconsejable para evitar problemas secundarios, como dolores de cabeza o irritación ocular. Si el hipermétrope quiere prescindir de la corrección óptica, puede beneficiarse de algunas técnicas de cirugía refractiva indicadas para personas con un grado de hipermetropía bajo. La cirugía refractiva para la corrección de la hipermetropía es especialmente delicada y requiere una evaluación previa completa para la selección apropiada de su tratamiento.
Presbicia
Es un defecto refractivo que se debe a la pérdida de elasticidad del cristalino, la lente natural del ojo que permite enfocar las imágenes a diferentes distancias. En consecuencia, la capacidad de acomodación disminuye, provocando un deterioro progresivo en la visión cercana. Se manifiesta generalmente luego de los 40 o 45 años.
La presbicia no se puede prevenir porque está ligada al proceso degenerativo del ojo; el cual, al igual que otras partes de nuestro organismo, evoluciona con la edad. En efecto, esta patología afecta a a más del 90% de los mayores de 45 años. Puede corregirse utilizando gafas o lentes de contacto, o mediante una cirugía.
